Por: Fernando Salinas
Foto: mediotiempo.com
Ante los números que Santiago está haciendo con el Feyenoord, los medios comienzan a plantearse: ¿Es hora de que dé el salto a ligas más competitivas? Por otro lado, los mexicanos -como siempre- comienzan a llamarlo "sobrevalorado". ¿Cuánta verdad tienen estas premisas? Vamos a verlo.
En primer lugar recordemos en qué liga está el mexicano. La Eredivisie de Países Bajos ya está, de acuerdo con el IFFHS (International Federation of Football History & Statistics), en el top 10 de las ligas más importantes del mundo.
De igual manera es la décima liga más valiosa del mundo, de acuerdo con datos de Transfermarkt, con un valor aproximado de 833 millones de euros.
Históricamente el Feyenoord de Rotterdam es para Países Bajos lo que para España es el Barcelona, o para México el Cruz Azul, siendo el segundo equipo más grande del país, solo por detrás del Ajax Ámsterdam.
Las estadísticas de Giménez en el equipo son fabulosas: 19 goles en su temporada debut y una racha de 6 partidos consecutivos con anotación. No va a ser sorpresa para nadie que muy pronto superará el récord del máximo goleador mexicano en Europa. Sin embargo, se sabe que dejarse llevar por las primeras impresiones en el fútbol traen como consecuencia la pérdida de millones de euros, tal como ocurrió con estrellas en ascenso que al principio hacían temporadas buenas y con el paso del tiempo se quedaron en promesas, como Dele Alli.
Por lo tanto, si bien Santiago tiene todo a su favor para hacer su debut en ligas de mayor peso, serán los equipos de esas ligas los que tendrán que considerar si el riesgo vale la pena o habrá que esperar y continuar observando su evolución y pasó con la liga neerlandesa, sobretodo en estos momentos donde la Eredivisie es el único torneo que tienen la posibilidad de ganar, tras su escandalosa caída ante el Roma en los cuartos de final de la Europa League.
Por otro lado, y como ocurre cada vez que un mexicano está conquistando una liga, es la propia afición la que termina siendo hater de sus jugadores. Aunque no concuerdo con Lozano cuando dijo "la afición nos tiene que apoyar" (cuando México empató con la selección número 139 en el ranking FIFA), yo creo que en el caso de los jugadores que están rompiéndola esto no debe ser de esta forma. Así como platicamos en la columna debut de esta sección "Ochoa y el mexicano", que puedes leer haciendo clic aquí, es necesario dejar las rivalidades entre clubes, y comenzar a reconocer cuando los futbolistas hacen un buen trabajo.
Sé que idealizar la convivencia en un mundo como el fútbol es bastante descabellado, pero bajarle tantito a la pasión y comenzar a disfrutar de las joyas mexicanas que todavía existen, harían del fútbol mexicano no solo más disfrutable, sino interesante.
¿Santiago estará listo para retirarse de Países Bajos? ¿O hay que dejar de idealizar las buenas temporadas?
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